DRIBLING
El dribling en el fútbol es una de las maniobras preferidas
por los fanáticos del fútbol y es una clara muestra de las condiciones
que tiene el jugador. No sólo es una simple maniobra individual, sino
que puede ayudar a abrir defensas y atraer marcas rivales para que un
compañero se pueda desmarcar.
El
dribling en el fútbol
o regate es algo que cada vez escasea más en el fútbol moderno, quizás
mucho tenga que ver el tema de que se prioriza mucho más que antes todo
lo referente a lo táctico y el
entrenamiento
físico, dando menos libertades para que los jugadores desarrollen todo
su potencial técnico. Los grandes ídolos que se destacaron en el fútbol
siempre deslumbraron por sus condiciones
técnicas deportivas
naturales donde el regate era parte fundamental de sus acciones,
burlando a las defensas con movimientos fantásticos y haciendo el
deleite de los hinchas.
El regate se entrena y se perfecciona, más allá que pueda tener un
factor natural que ya se trae incorporado, como se dice comúnmente “se
nace, no se hace”, pero el regate tiene un poco de las dos cosas. "El
fútbol se inicia en la cabeza, pasa por el cuerpo, y baja a los pies,
nunca al revés", y el regate es una muestra de inteligencia y de saber
leer las jugadas, por eso se le adjudica el título de “jugadores
inteligentes” a aquellos que saben llevar adelante este tipo de
maniobras.
Obviamente hay que tener en cuenta que el fútbol es un deporte
donde se debe priorizar lo colectivo por sobre lo individual, pero la
suma de individualidades puestas al servicio del equipo es una
combinación perfecta, y el regate forma parte de las aptitudes
individuales que aplicadas del modo correcto mejoran el juego de equipo.
Todo aquel jugador que domina la técnica del regate, estará en
clara ventaja sobre sus rivales y será muy difícil de marcarlo y
neutralizarlo, ya que posee un gran dominio de la pelota y pueden
generar grandes problemas a las defensas adversarias.
Es una combinación entre dominio de la pelota y equilibrio del
cuerpo, siendo una acción que puede abrir defensas y generar espacios
para que otros compañeros de equipo puedan desmarcarse al ser el
regateador el que se lleva las marcas.